Sabiendo que la situación no es fácil y que se complicará aún más, creo que es el mejor momento para aplicar eso de que los problemas crean oportunidades. Es en estos momentos, cuando debemos replantearnos algunos cambios, tanto en nuestras empresas como en nuestros clientes, dado que ellos también se enfrentan a cambios, y puede que sus requisitos o expectativas cambien. Igual es el momento de aplicar pequeñas mejoras progresivas y con el mínimo presupuesto.
Te dejo una pequeña historia para reflexionar sobre buscar siempre el éxito, mejorar.
Había un pequeño hotel llamado “ La estrella de plata”. Su dueño, aunque hacía lo imposible para atraer clientes, no lo lograba. Le resultaba difícil conseguir ingresos para llegar a fin de mes. Desesperado, acudió a consultar a un sabio. El sabio, tras escuchar su problema, le dijo:
- Es muy sencillo. Lo único que tienes que hacer es cambiar el nombre del hotel
- Esto no es posible. Siempre se ha llamado “ La estrella de plata” y es un nombre que gusta a los clientes que acuden a él.
- Si quieres mi consejo – le replicó el sabio -, a partir de ahora debes llamarle “ Las cuatro campanas” y cuelgas tres campanas sobre la puerta.
- ¿Tres campanas? ¡Eso es absurdo! ¿Para qué servirá?
- Inténtalo y lo verás, le respondió el sabio sonriendo
Como nada tenía que perder, el hotelero accedió a poner en práctica la propuesta del sabio y, a partir de entonces, todo viajero que pasaba delante del hotel entraba en él para advertir del error al hotelero, creyendo que hasta entonces nadie se había dado cuenta
Una vez dentro, quedaban impresionados por la amabilidad y el buen servicio que allí se ofrecía y decidían alojarse en el hotel.
A veces pequeños cambios, funcionan